Uno de los pilares fundamentales de la negociación internacional es el contacto directo con la contraparte. Desafortunadamente, en la era del COVID este procedimiento fue afectado por la imposibilidad de realizar acercamientos directos. Aunque esta práctica fue reemplazada por medios digitales, el avance de cualquier negociación se ralentizó por las pausas e interacciones externas que influyen sobre dicha discusión. Esto se evidencia en la inhabilidad de hiperfocalizar la solución de un punto de agenda con una interacción sobre un documento, sin interrupciones o pausas externas, leyendo las sutiles señales no verbales respecto a los temas siendo negociados con el fin de determinar un acuerdo satisfactorio para las partes. Esto, no puede ser más evidente que con la respuesta de la comunidad de propiedad intelectual hacia el COVID-19 ya que al identificar esta conmoción social e internacional, direccionó todos sus esfuerzos a la identificación de moleculas que pudieran contrarestar un virus inesperadamente letal para la humanidad.
Paises unieron sus esfuerzos sin acceso presencial de sus mejores negociadores para determinar una avenida con sus pares que permita el acceso a información de laboratorios, empresas y paises con recursos quienes puedan proveer y/o facilitar una solución a corto, mediano y largo plazo para controlar y solucionar este tema. Este proceso no fue simple ya que los paises que componen las comunidades internacionales estuvieron forzados a mirar la respuesta de sus paises, a lidiar con la perdida de vidas y el determinar las prioridades inmediatas para su trato. El costo de este proceso fue el paso del tiempo, mientras la comunidad interncional desarrollaba nuevas técnicas para sobrellevar la imposibilidad de tener un contacto presencial con expertos en la materia para liderar dichas discusiones.
Sobrellevado este inconveniente, los paises se estructuraron tomando en consideración las técnicas aplicadas anteriormente para enfermedades como ébola, optando por un trabajo de prevención y control de contagio, mientras simultaneamente se han tratado de identificar metodologias de elaboración y distribución de medicamentos e insumos médicos con atención al comercio internacional y utilizar las avenidas disponibles por la propiedad intelectual para replicar dichos productos y servicios.
Iniciativas
Una de las primeras iniciativas de la comunidad internacional en
temas de propiedad intelectual fue acumular y poner información de libre
disposición y en lo posible, comprometer a privados y públicos para otorgar
información de interés respecto al impacto de esta amenaza y sus posibles
soluciones mediante el sistema Patentscope[1]
disponible en la página de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual –
OMPI. Los factores que determinarían el
éxito de esta herramienta son la facilidad de acceso y comprensión para los
entendidos de la materia en ciencia, técnología, desarrollo y producción; para
posteriormente validar el mismo con la aceptación de los titulares de estos
derechos en caso de no ser de libre consulta.

Dentro de esta base se detalla en los idiomas oficiales de la OMPI las siguientes tecnologías:

De manera adicional, por medio de la Organización Mundial de Salud
en mayo de 2020 se implementó la iniciativa COVID-19 Technology Access Pool o C-TAP[1],
la que fue liderada por Costa Rica e impulsada con el apoyo de Ecuador. Esta
iniciativa se basa generalmente en el modelo de intercambio de infomración tecnológica interiormente
implementado por el Medicine Patent Pool - MPP[2],
una organización creada con la finalidad de facilitar licencias y difundir
información sobre patentes de medicamentos de medicinas como VIH, Hepatitis C,
tuberculosis, así como enfermedades relacionadas.
Esta iniciativa buscaba solucionar otro conflicto que identificó la
comunidad internacional al tratar esta pandemia, y es la capacidad de
producción e importación de los paises de los insumos necesarios para contrarrestar
el virus. Esto se debió a que paises desarrollados en contraposición con los
paises en desarrollo se encontraban con diferentes capacidades para abasteserse
de estos productos y aliviar la situación actual de sus paises.
Propuestas y posturas
Uno de los principales puntos de negociación en esta instancia fue
el determinar la posición que tomó cada pais conforme a sus prioridades y
posibilidades, e identificar aquellos que se encontraban flexibles a modificar su
posición. Es importante recalcar que todo esta gestión se realizó mediante un
proceso de comunicación por métodos alternativos, que implicó el tener que identificar
rutas que contabilicen las autorizaciones de los diferentes representantes de
cada país para salud, comercio, propiedad intelectual, entre otros, quienes
debieron ser consultados para este efecto. Al considerar que este proceso de
comunicación implicó el trabajar con el cambio de horarios, dificultando el uso
de métodos telemáticos para tener una
conversación con un par, o en su defecto, el estar sujeto a las espera de
respuestas mediante correo electrónico o valija diplomática. La solución de
este proceso y la identificación de estas posiciones como resultado se tradució
en tiempo, paises con mayores conexiones internacionales impulsaron y se sobrepusieron
a este proceso, mientras que paises quienes se encontraban con personal
limitado para realizar estas conexiones tuvieron demoras inesperadas hasta
crear una avenida que satisfaga estas necesidades de la imposibilidad de viaje
de sus expertos en estas materiales.
Como resultado de este trabajo de negociación surgieron varias
propuestas[1]
para la pandemia, sin embargo, despuntaron dos propuestas principales en el
seno de la Organización Mundial de Comercio - OMC: La primera basa su análisis
en el alcance del Acuerdo sobre los Aspectos de los Derechos de Propiedad
Intelectual relacionados con el Comercio – ADPIC, determinando la necesidad de
crear una excepción permitiendo el uso
de propiedad intelectual sin el consentimiento de sus titulares para efectos de
la pandemia[2],
propuesta que fue presentada originalmente por India y Sudáfrica y una segunda
con la premisa de mejorar el rol de la OMC en el esfuerzo global hacia la
producción y distribuciónde vacunas, propuesta presentada por Canadá.
Es importante el mencionar unos aspectos respecto a la primera
propuesta, que incluía una extensión para derechos de autor y derechos conexos,
dibujos y modelos industriales, patentes y protección de informacción no
divulgada, por un número ineterminado de años hasta generalizar la cobertura de
la vacunación a nivel mundial. Esta propuesta fue rapidamente distribuida a los
paises de la OMC con la finalidad de llegar a un concenso sobre su
implementación, que ha resultado en varias versiones, adaptandose a la negociación
mantenida en la OMC. A la fecha, por
falta de consenso entre los países por su visión generalizada, sigue siendo
estudiada.
La segunda propuesta:“Mejorar el rol de la OMC en el esfuerzo
global hacia la producción y distribución de vacunas COVID-19 y otros productos
médicos”[3]
en marzo de 2021 proponía el impulso de las herramientas disponibles en ADPIC y
con sujeción a la Declaración de Doha, con especial atención a las limitaciones
y excepciones habilitadas para beneficio de los países miembros. Con el
objetivo de impulsar y facilitar licencias beneficiosas entre productores y
desarrolladores, promoviendo la transferencia de tecnología, experticia y
know-how, así como mantener un criterio alineado con esta premisa para
productos médicos esenciales relacionados a la lucha del COVID-19.
Esta propuesta por su lado fue observada por los
miembros de la OMC, al no contener factores concretos que permitan su
aplicación práctica, y se basaba en su gran mayoría en la buena voluntad de los
países en capacidad de desarrollar y producir vacunas para su distribución. Esta
propuesta de igual manera se encuentra en discusión ante el foro de la OMC.
Como se ha mencionado anteriormente, este proceso de organización y negociación entre los países miembros de la OMC fue y es arduo, ya que requirió la creación de herramientas alternativas para responder de manera efectiva a la negociación que se llevaba a cabo ante este órgano de manera semi-presencial, virtual, en varios usos horarios, y atendiendo a las posiciones y necesidades de los entes involucrados nacionales e internacionales que eran directamente afectados por su discusión.
[1] Covid-19 las propuestas, https://www.wto.org/spanish/tratop_s/covid19_s/proposals_s.htm.
[2] IP/C/W/669, Excención de determinadas disposiciones del Acuerdo sobre los ADPIC para la prevención, contención y tratamiento de la COVID-19, https://docs.wto.org/dol2fe/Pages/SS/directdoc.aspx?filename=s:/IP/C/W669.pdf&Open=True, 2 de octubre de 2020.
¿Cuál ha sido la postura del Ecuador en esta negociación internacional?
ElEcuador promueve el acceso a las vacunas contra el COVID-19, su distribución equitativa, la atención prioritaria a los países más afectados por la pandemia y la inmunización a escala mundial para la realización del derecho humano a la salud.
Ecuador conforme la normativa nacional e internacional ha manifestado su adhesión a las obligaciones contenidas dentro del ADPIC, incluidas las excepciones y flexibilidades permitidas por el Acuerdo de ADPIC, en particular aquellas necesarias para proteger la salud pública y garantizar el acceso a medicamentos, y que resultan de particular importancia en el marco de la pandemia.
Dentro de este criterio, el Ecuador ha resaltado la importancia que tienen las flexibilidades de ADPIC para mantener un equilibrio entre los derechos de los titulares de propiedad intelectual y el interés público a corto, mediano y largo plazo.
Con la lógica de que toda modificación de las obligaciones y flexibilidades del ADPIC, temporal o permanente, se debe establecer una relación inequívoca entre el objetivo legítimo y la modificación propuesta, así como las ventajas reales que esta modificación tendría para la consecución del interés público, la protección de la salud y el acceso a los medicamentos.
Ecuador ha considerado que las flexibilidades del ADPIC establecen salvaguardas adecuadas para permitir el uso de materia protegida sin autorización del titular. En este sentido, se ha considerando prioritario implementar mecanismos adicionales que garanticen el acceso a medicamentos para el tratamiento y prevención del COVID, así como el levantamiento a las restricciones a la exportación y la fabricación en cantidades suficientes de los medicamentos y dispositivos en los países productores.
A partir de esta visión y para fomentar la producción de vacunas y la inmunización de la población a escala mundial, el Ecuador ha promovido activamente que la comunidad internacionalidentifique los factores de mayor factibilidad de implementación para los países de las propuestas presentadas ante la OMC, con atención a un acercamiento práctico y global.Negociar sobre textos concretos dentro del Consejo de los ADPIC, que permitan llegar a una decisión de consenso, según se requiere en los procedimientos de la OMC; y,la participación dinámica, solidaria y constructiva de todos los países a fin de obtener resultados sustantivos en el menor tiempo posible. Las naciones necesitan medidas concretas que de manera inmediata y efectiva les den acceso a suficientes vacunas de calidad, materiales de detección y protección a precios asequibles.
Ecuador es un importador de vacunas, depende de un sistema comercial multilateral previsible y robusto con estabilidad en el tiempo que le permita responder a la actual crisis de manera integral, y con capacidad de evolucionar para responder a versiones futuras de esta situación actual y de otras pandemias. Desde esta perspectiva, la negociación debe además de garantizar la producción y el acceso a vacunas de calidad, a las siguientes acciones:
-
Suprimir aquellas restricciones y obstáculos que se
susciten para la exportación de materias y medicamentos para tratar el COVID-19[1];
-
Promover la producción de cantidades suficientes de
vacunas de calidad mediante procesos equitativos y eficientes, fomentando la
expansión de la producción y su distribución;
-
Facilitar el comercio en todas sus fases, incluidos los
procedimientos aduaneros y logísticos, y la movilidad del personal sanitario;
-
Alentar canales de cooperación pública y privada para la
transferencia de conocimientos y tecnología hacia las naciones en desarrollo;
y,
-
Armonizar con procedimientos rápidos y transparentes los
estándares para la aprobación y aceptación mundial de vacunas, diagnósticos y
pruebas.
-
Alentar
el respeto de la propiedad intelectual como una herramienta para el impulso de
la investigación y el desarrollo en situaciones a gran escala como la actual.
Los procesos que se implementan para llegar a estas posturas, no son
simples ya que toma un trabajo de
coordinación entre varios actores nacionales, atender a compromisos
internacionales y proyectar el impacto de los acuerdos asumidos, solo así se
puede determinar una respuesta concisa al constante cambio de las propuestas y
de la información que se encuentraba siendo recibida por el Ecuador para dar
una respuesta a su necesidad nacional.
[1] Communication By Colombia, Costa Rica, Dominican Republic, Ecuador, Panama and Paraguay on Trade Restrictions That Hamper Equitable Access To Covid-19 Vaccines, WT/GC/W/826
